Cómo solucionar la baja presión de agua en la ducha

La baja presión de agua en la ducha es un problema común y para ser honesto, de las cosas más molestas que podemos vivir en una mañana cualquiera, incluso si solo ocurre por un corto tiempo.

La presión de agua no afecta, por ejemplo, al descargar un inodoro ya que la presión del agua mientras te bañas, volviéndote temporalmente incómodo, y otros problemas pueden limitar la presión a largo plazo hasta que se repare el problema de raíz.

En este pequeño artículo, los profesionales de Master Equipos nos explican las causas de la baja presión de agua en las duchas, así como cómo solucionar la baja presión de agua en los cabezales de ducha.

¿Por qué no tiene presión mi ducha?

Causas de la baja presión de agua en las duchas Hay varios problemas de plomería que pueden llevar a una baja presión en una ducha. Solucionar este problema comienza con descubrir la fuente del problema.

A continuación, nuestros expertos explican problemas comunes que pueden ser los culpables de tus problemas de presión de agua en la ducha y cómo solucionar cada uno.

Válvula desviadora defectuosa

Si tienes una instalación que combina bañera y ducha, es probable que esté equipada con una válvula desviadora.

Esta válvula, que puede ser un interruptor o una perilla, dirige el flujo de agua desde el grifo de la bañera hacia el cabezal de la ducha.

Con el uso continuado, es común que estas válvulas presenten fallos o incluso dejen de funcionar del todo, lo que impide que se abran completamente y reduce la presión del agua en la ducha.

Aunque es normal que caigan algunas gotas del grifo de la bañera mientras el agua se desvía hacia la ducha, un flujo constante de agua indica que la válvula desviadora necesita ser reemplazada.

Signos de una Válvula Desviadora Defectuosa

Reconocer los signos de una válvula desviadora defectuosa puede ayudarte a determinar si este componente está causando problemas en tu sistema de calefacción y agua caliente. Aquí te describo los problemas más comunes asociados con las válvulas desviadoras:

  1. No hay agua caliente: Si observas que no sale agua caliente de tus grifos y los radiadores permanecen fríos, esto podría ser una señal de que las válvulas desviadoras no están operando eficientemente.
  2. Agua caliente, pero sin calefacción: Si tienes agua caliente pero la calefacción no funciona, esto sugiere que la válvula desviadora no puede redirigir adecuadamente el agua caliente hacia los radiadores.
  3. Agua tibia: Si el agua que sale es solo tibia, puede ser una indicación de que la válvula desviadora está distribuyendo el calor en lugar de concentrarlo donde es necesario.

Limitaciones de la válvula de equilibrio de presión

Si hay una válvula de equilibrio de presión en tu ducha (una perilla única que controla tanto la temperatura del agua como el caudal), esto puede resultar en interrupciones en la presión del agua, así como en la temperatura del agua cuando se usan otros accesorios de plomería como inodoros.

Estos tipos de válvulas funcionan combinando agua caliente y fría a niveles de presión específicos. Esto significa que cuando se descarga un inodoro, el agua fría se desviará para rellenar el tanque, lo que causará una reducción de la presión en la línea de suministro de agua fría.

La válvula de equilibrio de presión tarda unos segundos en ajustarse, lo que significa que la presión del agua se reducirá para evitar que te escaldas en la ducha. Una vez que regrese la presión fría, la válvula de la ducha aumentará la presión del agua caliente para igualarla.

Solucionar este problema implica que un plomero repare la válvula de equilibrio de presión.

Válvula mezcladora defectuosa

Si el grifo de tu bañera de perilla única tiene una válvula mezcladora termostática en lugar de una válvula de equilibrio de presión, aún pueden ocurrir problemas de presión de agua.

Si la válvula mezcladora se atasca o se desgasta, este mal funcionamiento puede interrumpir la presión del agua en tu ducha.

Contacta a un plomero certificado cerca de ti si notas este problema. La válvula mezcladora puede ser difícil de acceder, por lo que la reparación o el reemplazo deben dejarse en manos de un profesional.

Regulador de presión de agua defectuoso

El regulador de presión de agua del sistema de plomería funciona para mantener el agua a un rango de presión seguro. Por lo general, la presión del agua se establece entre 40 y 80 psi. Si el regulador de presión de agua no funciona correctamente, la presión del agua en todo el sistema de plomería puede volverse demasiado alta o demasiado baja.

Este problema requiere la instalación de un nuevo regulador de presión de agua. Se debe llamar a tu plomero para este trabajo y quitará el componente viejo e instalará un nuevo regulador en la línea principal de suministro de agua de la casa.

Tubería obstruida o rota

Esta es la peor causa posible de una reducción en la presión del agua en tu ducha porque la fuga resultante puede causar daños graves a tu hogar. Si escuchas goteos o agua corriendo cuando todos los grifos están cerrados o si notas manchas de agua en cualquier lugar, debes cerrar inmediatamente el suministro de agua en la válvula principal y hacer una llamada de emergencia a tu plomero de confianza.

Además, las tuberías galvanizadas viejas se deteriorarán desde adentro hacia afuera, lo que hace que el diámetro interior se reduzca y cause una caída en la presión del agua. La única solución para este problema es reemplazar las tuberías viejas y corroídas.

Un plomero debe solucionar primero el problema de las tuberías, lo que debería resolver los problemas de presión de agua que afectan tu ducha.

Como por ejemplo, estos problemas suelen ser fáciles de encontrar en un jardín o en una tubería que lleva agua a una piscina, pero dentro de la casa, se necesitará un aparato especial para poder detectarlo.

Una cabeza de ducha obstruido

En algunos casos, la presión desigual de la ducha puede deberse a algo tan simple como un cabezal de ducha obstruido (algunos le llaman alcachofa).

Arreglar los problemas de la baja presión de agua en los cabezales de ducha causada por cabezales obstruidos implica quitar el cabezal de ducha y limpiarlo bien, si el problema persiste, habrá que cambiarla por completo.

¿Cómo hacerlo? Desenrosca el cabezal de la pared si es posible y remójalo en una solución de limpieza durante una o dos horas, recuerda que dependiendo de la calidad del agua y su dureza, puede acumular grandes cantidades de sarro y esto puede ser la causa.

Si no puedes quitar el accesorio, simplemente llena una bolsa de plástico pequeña con tu solución y colócala sobre el accesorio, asegurándola con una banda elástica. Retíralo de la solución y limpia todas las boquillas con un cepillo de dientes viejo.

Si hay moho dentro o en tu cabezal de ducha, también deberá limpiarse a fondo con cloro. Enjuaga el cabezal de ducha y vuelve a instalarlo.

Conclusiones

En resumen, para mejorar la presión del agua en la ducha, debemos considerar varios factores:

  1. Asegurarnos de que no haya otros grifos o electrodomésticos funcionando al mismo tiempo que la ducha, ya que esto puede reducir la presión del agua.
  2. Comprobar que la cabeza de la ducha esté libre de cal y suciedad. Para limpiarla, podemos desmontar esta cabeza, sumergirla en agua con vinagre durante unas horas y eliminar cualquier residuo.
  3. Verificar que las tuberías tengan el diámetro adecuado. Si las tuberías son demasiado estrechas, puede ser necesario consultar a un profesional de fontanería para considerar la instalación de tuberías nuevas.
  4. Si la cabeza de la ducha está limpia y en buen estado, una solución sencilla y económica es instalar nebulizadores o incluso cambiar o mejorar los mezcladores de agua en la ducha. Estos dispositivos no solo aumentan la presión del agua, sino que también pueden ayudar a ahorrar hasta un 50% del consumo de agua.